Por más de una década Jason Slate ha representado legalmente a clientes con asuntos de lesiones personales de manera compasiva y diligente. Durante este tiempo ha manejado casos de cualquier tipo de lesiones personales, desde choques de auto, resbalón y caída, colisiones de camiones comerciales, negligencia médica, y problemas con productos defectuosos que son responsables de muertes injustas.
Durante su carrera, el señor Slate se ha enfocado en litigación de lesiones personales, representando y acompañando a los clientes en la tarea de hacer una demanda, ya que puede ser un intimidante e incomprendido proceso legal. Muchos abogados negocian una compensación menor para evitar ir al tribunal, pero el señor Slate ha litigado y manejado casos con jurados desde el inicio de su carrera para asegurar que todos sus clientes reciban la mejor oferta y una justa compensación por sus lesiones y demás consecuencias que afecten sus vidas. El señor Slate siempre trabaja diligentemente para asegurar que sus clientes entiendan por completo todo el proceso, desde la denuncia inicial, la investigación, las deposiciones, y hasta la defensa en el tribunal, brindándoles total confianza a los clientes de preguntar cualquier duda que tengan de su proceso. Mientras las aseguradoras se ven incentivadas económicamente a cerrar un proceso de lesiones personales lo antes posible, él le explica a los clientes todos los pasos necesarios para obtener un resultado justo.
Antes de vincularse a la firma de abogados Ali Awad Law, P.C, el señor Slate ejercía como abogado litigante en práctica privada y para otras reconocidas firmas en Atlanta y su área metropolitana. Toda su práctica se ha enfocado en representar gente lesionada y ayudarlos a que sus vidas regresen a la normalidad. El señor Slate obtuvo su título universitario en University of Georgia y su doctorado en derecho en Mercer University. Pertenece a varias organizaciones profesionales. Él es miembro de Million Dollar Advocates Forum, membresía limitada solo a abogados que han ganado multimillonarios juicios y negociaciones. Menos del 1% de los abogados de Estados Unidos tienen este privilegio.